Si tu hijo rechina los dientes decimos que bruxa. El bruxismo es una disfunción de la relación de los contactos dentales, y se hace tanto de manera consciente como inconscientemente.
Las causas no están claras pero parecen estar relacionadas con factores psicológicos, contactos inadecuados entre los dientes y/o factores hereditarios.
Es frecuente su aparición entre los dos y cuatro años de edad, cuando el niño entra en una fase de intensas modificaciones psicosociales.
¿Qué consecuencias puede tener ese rechinamiento?
Si el bruxismo es muy intenso podrían aparecer grandes desgastes dentarios, molestias en la articulación temporomandibular, dolor de cabeza y de la musculatura facial y/o cervical causado por la sobrecarga a la que se someten los músculos.
¿Que debo hacer si mi hijo rechina los dientes?
Se debe vigilar al niño para comprobar en qué momento del día bruxa, si es por el día, por la noche o ambos.
El tratamiento comprende desde la vigilancia de la evolución del rechinamiento pasando por la necesidad de administrar ciertos medicamentos hasta la colocación de un aparto removible fabricado a medida de la boca del niño llamado férula de relajación.
Pero es cierto que en la mayoría de los casos de bruxismo en niños no hay que hacer nada y suele desaparecer conforme va cambiando la dentición temporal por la definitiva, solamente en casos muy severos con sintomatología se deberá hacer la férula de descarga.
El diagnóstico precoz es fundamental para establecer un programa de revisiones adecuado por eso no duden en acudir a una consulta con nuestro equipo de DOA dental.